lunes, 28 de abril de 2008

Malviaje sin nùmero

No numero mis malviajes porque correrìa el riesgo de llegar a cifras de dìgitos incontables...

Ahora deberìa estar lloviendo, y si lloviera, yo deberìa estar bajo las gotas, mirando al cielo gris espeso, con los brazos abiertos y danzando sobre las puntas de mis pies... pero estoy encerrada frente a la computadora, rodeada del ruido de teclas que caen y una voz monòtona al fondo... claro que, como soy especialista en evadirme, de repente me encuentro con que el rìtmico golpeteo de dedos que escriben es la lluvia acompasada que me moja toda, toda...

La tarde se presta para ponerse a recordar... no sè què, pero todo lo que pienso adquiere un tono sepia y sin duda los recuerdos son sepia... una foto amarillenta, un pergamino...

A ratos leo a Cortàzar... su lenguaje es tan bello... no podrìa explicarlo en este momento... usualmente no sè explicarme bien... pero es algo que entiendo desde muy dentro... que esclarece, que ilumina, pero que tambièn deslumbra y desorienta...

Ademàs de mojarme bajo la lluvia, quisiera cantar a todo volumen : "I'm singin' in the rain... "
Tambièn quisiera acurrucarme junto a una chimenea, felinamente, y dormir hasta el cansancio...
O transformarme en niebla, en murcièlago para salir volando... claro que los murcièlagos son ciegos y un poco feos... la niebla estarìa bien...

Mis pàrpados se cierran y los dedos languidecen poco a poco, obligàndome a truncar el divague, aunque podrìa seguir y seguir... como mis eternas espirales, eternas eternas espirales... y un poco de humedad proveniente de los lagrimales nubla mi visiòn... mi de por sì nublada visiòn...

Es tiempo de volver, de aterrizar... què triste...

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